El pasado día 5 de junio, medio mundo ha celebrado el Día Mundial del Medio Ambiente, centrado este año en la contaminación por plásticos. Cada año se vierten en los océanos 8 millones de toneladas de plástico, lo que supone la destrucción de los ecosistemas y una amenaza para nuestra vida. Como ha informado Naciones Unidas, existen cuatro áreas clave para poder combatir este problema:
- Reducir los plásticos de un solo uso
- Mejorar la gestión de residuos
- Erradicar los microplásticos
- Promover la investigación de alternativas
Ante la alarmante presencia de plástico en los ecosistemas marinos, la FAO ha publicado un informe sobre la presencia de microplásticos para arrojar algo de luz. A lo largo de este artículo te darás cuenta de lo importante que es reducir la cantidad de plástico que se vierte a los océanos, de su trascendencia y de que cada uno de nosotros puede hacer mucho para reducir las consecuencias de este problema que nos afecta a todos.
Día a día
Envases de productos, ingredientes cosméticos, textil de ropa, materiales de construcción… ¡el plástico nos invade! Es un material que tiene múltiples usos y por tanto dependemos mucho de él. El problema es que la mayoría de las veces este plástico es de un solo uso y esto es algo que tiene graves consecuencias para el medio ambiente. El aumento en el uso que hacemos de él, amenaza el medio ambiente lo que supone poner en peligro nuestra salud, la de los ecosistemas, especialmente de los acuáticos; y las especies que habitan en ellos. Los mares y los océanos son los grandes perjudicados, ya que gran parte de los deshechos van a parar allí. Se estima que cada año albergan 12 millones de toneladas de basura.
Más de la mitad de la producción de productos de plástico va destinada a hacer productos desechables de los cuales, las bolsas, son las grandes protagonistas y las que más impacto causan en el medio ambiente ya que son de uso breve, pero tardan mucho en eliminarse. Concretamente en el caso de las bolsas, hablamos de que tardan más de un siglo en degradarse ya que están fabricadas a base de materiales derivados del petróleo, pudiendo contener incluso sustancias tóxicas por el empleo de tintas. ¿Dónde acaban estos artículos de plástico de un solo uso? Incinerados, reciclados, en vertederos o arrojados al medio ambiente. Se calcula que:
- Sólo un 9% del plástico es reciclado
- Un 12% es incinerado
- Un 79% es acumulado en vertederos
Según datos de la asociación de fabricantes de plástico PlasticsEurope, las principales aplicaciones de este material son:
- 39,9%: Embalaje o empaquetado
- 19,7%: Construcción
- 8,9%: Sector automovilístico
- 5,8%: Electricidad y electrónica
- 3,3%: Agricultura
- 22,4%: Otras aplicaciones (incluyendo electrodomésticos, muebles, deportes, salud y seguridad)
Enemigo número 1 de mares y océanos
La realidad es que se trata de un problema que va en aumento y se calcula que la producción de plásticos alcanzará los 500 millones de toneladas para el año 2020, un 900% más que en 1980. Con esta cifra unido al lento proceso de degradación del plástico, lo convierten en el principal enemigo de mares y océanos.
Y de comer, ¿plástico?
Dentro de este componente podemos hablar de una variedad, altamente contaminante: los microplásticos. Se trata de fragmentos inferiores a 5 mm presentes en productos de higiene y limpieza como pastas de dientes, detergentes, etc. Cada bote de 100ml puede contener entre 130 000 y 2,8 millones de este diminuto material que va directamente al mar ya que los filtros de las depuradoras no pueden atraparlo dado su reducido tamaño. ¿Sabes lo que ocurre con estos microplásticos? Recientes estudios han desvelado que son ingeridos por la fauna marina lo que está provocando problemas gastrointestinales y alteraciones en sus patrones de alimentación y reproducción. Pero la cadena no se para ahí, existen evidencias de que estos microplásticos se transfieren a lo largo de la cadena alimentaria y llegan hasta nuestros platos.
Existen investigaciones actuales que muestran que más de 90% del agua embotellada y 83% del agua del grifo contienen microplásticos. Nadie está seguro de lo que eso significa para la salud humana, pero cantidades crecientes están apareciendo en nuestra sangre, estómagos y pulmones con una regularidad cada vez mayor. La conclusión es que es muy probable que los microplásticos no sean absorbidos ni entren en contacto con órganos vitales. Sí podría ser el caso de los nanoplásticos, pero la FAO concluye que los datos disponibles hasta el momento no permiten deducir que se trate de un riesgo para la salud, ni siquiera leve.
El uso de plástico en cifras
- Cada año se usan 500 mil millones de bolsas de plástico en el mundo
- En la última década produjimos más plástico que en todo el siglo pasado
- El 50% del plástico es desechable o de un solo uso
- Cada minuto compramos 1 millón de botellas de plástico
- Cada año usamos 17 millones de barriles de petróleo para producir botellas de agua
- En el año 2016 se vendieron 480 mil millones de botellas de plástico en todo el mundo
- El plástico representa el 10% de todos los residuos que generamos
- España es el quinto productor de la UE